Noticias en EL VESPERTINO DE EARLINDE:
¡Aiya, todos!
Rosario estuvo, además de
cerca (como dice la canción), frío y lluvioso en el primer día. Pero el gazebo
en el parque de la bella Casona se armó igual y fue refugio para muchos
caminantes. Hubo largas ruedas de mates y muchos nuevos amigos. Por la noche y
luego de dejar a bolsos, bolsas de dormir, mochilas y demás en un club donde
pernoctaríamos, caminamos hasta una posada donde pasamos una velada medieval
con juglares y varias pintas de cerveza (no tantas)
El regreso fue en
olifante-bus, unos amarillos que caminan por esa ciudadela.
Dormimos mejor de lo que
esperábamos, ¡¡¡¡DORMIMOS!!!!
Por la mañana, la barca
del sol irradiaba con gusto la llegada del nuevo día y todos –artesanos y
recreadores– pudimos armar la fiesta en el parque. Vale aclarar que el día
anterior tuvieron que hacerlo en el interior de la casona.
Fue una jornada mágica,
hubo enfrentamiento de brujos y hechiceros, de aguerridos guerreros, el
casamiento entre la Dama Blanca y un noble caballero. Danzas y mucha
música.
Habrá que agrandar el
Faro, ya que muchos se fueron sumando y les tendremos que dar una bienvenida
bien hobbit: y eso significa bien nutrida. Quizá, dentro de muy poco, tengamos Eärlinderos
que se reúnan en Rosario.
El regreso fue muy bueno,
el olifante-bus nos trajo sanos y salvos a destino y ahora nos resta descansar.
Mañana intentaré compartir fotos, que hay a granel y por todas las habitaciones
de Eärlinde.
Que tengan sueños bellos.
Lindëar Luin.
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